domingo, 4 de diciembre de 2016

¿Cerveza después de hacer deporte? ¿Y si es "cerveza isotónica"?

¡Nuevo artículo del colaborador del blog Ander Diego!

Hace un tiempo empezaron a salir noticias relacionadas con la cerveza y sus beneficios en los deportistas. La mayoría de estas noticias hacían referencia a los beneficios que nos otorga su consumo después del entrenamiento y/o competición. 

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En este artículo me voy a centrar en desmentir aquellas noticias que decían que "la cerveza hidrata tanto o más que el agua". 




Esas noticias hacían referencia a un estudio. Tras indagar un poco en el asunto encontré el estudio en cuestión

En el estudio cogieron a 16 hombres y los pusieron a correr a un 60% de su VO2 máx. durante una hora. La temperatura ambiente fue de 35ºC con una humedad relativa del 60%. Realizaron la prueba dos veces con una separación de tres semanas.Tras el ejercicio, cada sujeto seguiría uno de los dos posibles protocolos de rehidratación asignados aleatoriamente a cada uno de ellos. Dichos protocolos fueron:

  • Protocolo 1: los participantes a los que se les asignó este protocolo podrían beber hasta un máximo de 660 ml de cerveza estándar (4,5% alcohol) y, tras ello, la cantidad que quisieran de agua mineral.
  • Protocolo 2: los participantes de este protocolo sólo podían beber agua mineral, pero toda la cantidad que quisieran.

Una vez analizados algunos parámetros (peso, hematocrito, niveles de hierro, creatinina, etc) durante las tres fases del estudio (pre-ejercicio, post-ejercicio y post-rehidratación) concluyeron que no se había encontrado ningún efecto que hiciera a la cerveza desaconsejable tras hacer ejercicio.

Cabe destacar que la financiación de este estudio corrió a cargo de la industria cervecera. Y dad por hecho que la industria y las empresas alimentarias nunca publican datos que no les sean favorables.

Por ello, quiero mencionar una fuente de información independiente de la industria cervecera. Aquí es donde entran en juego el experimento que llevaron a cabo Luis F. Aragón y Rebeca Flores, de la Universidad de Costa Rica:

  • Sometieron a once voluntarios varones a distintas pruebas físicas hasta que perdieron un 2% de la masa corporal. Tras esto, les proporcionaron  cerveza con alcohol,  agua y cerveza sin alcohol. El objetivo era evaluar los efectos de cada bebida de cara a la rehidratación de los sujetos.


De acorde a los resultados obtenidos, la conclusión fue que la cerveza con alcohol no es eficaz para la rehidratación, ni para saciar la sed después de realizar actividad física. Además de perjudicar el equilibrio y los reflejos.

Resultados lógicos, de sentido común y sin conflictos de interés. Sin embargo, al de un tiempo apareció la cerveza isotónica de San Miguel como la “bebida deportiva/rehidratante” definitiva.



Como habréis podido apreciar, he escrito el concepto de bebida deportiva o rehidratante entre comillas. ¿Por qué? Porque no lo es.

¿Que porqué no lo es? Para ello hemos de acudir al concepto de bebida rehidratante o deportiva, explicado en este comunicado de la Federación Española de Medicina del Deporte. Resumidamente, los parámetros que contempla dicho comunicado son los siguientes:

  • Ha de ser una bebida que aporte entre 80 y 350 kcals por litro.
  • Al menos el 75% de las kcals han de proceder de hidratos de carbono de alto índice glucémico.
  • No contendrá más de un 9% de hidratos de carbono, es decir, 90 gr de hidratos de carbono serán el máximo para un litro de bebida isotónica.
  • La cantidad de sodio por litro estará comprendida entre 460 y 1150 mg. Entre 46 y 115 mg por 100 ml. O entre 20 y 50 mmol/l.
  • La osmolaridad se encontrará entre 200 y 330 mOsm/kg de agua.

Para empezar, obviamente una bebida de reposición no puede contener alcohol. Un litro de cerveza de un 5% de graduación aporta en torno a unas 450 kcals por litro, lo que incumpliría directamente el primer punto anteriormente expuesto. De aquí se concluye que no nos pueden vender cerveza con alcohol como bebida isotónica.

Curiosidad: el efecto diurético de la cerveza viene dado 
por la alta relación potasio:sodio (23:1) a favor del primero.

Ahora pasamos a la cerveza isotónica de San Miguel, que aunque no contiene alcohol, si nos fijamos en la etiqueta nos dice que contiene 0,01 gr de sal por 100 ml, o lo que es lo mismo 10 mg de sal: Sabiendo que la sal contiene un 38% de sodio, la cantidad de final de este sería de 3’8 mg, aproximadamente, por 100 ml. Incumpliendo el tercer punto anteriormente escrito.

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Efectivamente, sólo por incumplir este requisito no se le puede llamar bebida deportiva o rehidratante a esta cerveza. Pese a ello, ya sea desde la marca en sí, o desde los supermercados, se sigue intentando vender como bebida deportiva.

Para concluir, me gustaría añadir que hubo gente que les cazó, en concreto, la SEMED (Sociedad Española de Medicina del Deporte) y el CGCOM (Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos). Y al ver que la cerveza isotónica de San Miguel no cumplía con los requisitos,  emitieron un comunicado sobre dicho producto.

Sobre el autor: 
"¡Buenas! Me llamo Ander Diego Fernández, tengo 23 años y soy un compi de clase de Ibón. Efectivamente, también soy estudiante del Grado Superior de Dietética.
He de decir que la dietética no fue mi primera opción, empecé la carrera de matemáticas - una de mis pasiones - en la universidad, pero por motivos extraacadémicos me vi obligado a dejarla. Dado que llevaba años leyendo sobre nutrición y dietética me decidí a realizar el ya mencionado grado superior. 
Actualmente, todo lo relacionado con la alimentación se ha convertido en mi pasión. Soy una persona que lee e investiga mucho sobre la nutrición y la dietética. 
Además, otra de mis pasiones es el deporte. En mi caso, y mi mayor pasión, es el fútbol sala. Deporte que llevo practicando desde los seis años y que, desde hace muchos - ni me acuerdo ya -, de forma federada - Federación Vasca -.

Por otra parte, también me gustan mucho y practico, pero en menor medida, el entrenamiento de fuerza y el running."


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